Orange Green Pink

El ojo que te mira

El finde de fin de año!


No tenía pensado hacer este post, pero la crónica que ha hecho Sarg sobre el pedazo concierto de Fito me ha animado. Además, si lo pienso, tengo muy pocas ganas de terminar el año trabajando y el finde de fin de año ha sido demasiado bueno como para no dejar algo por aquí escrito. No sé cómo entraré en 2008, pero dudo que pueda ser tan bien como estoy saliendo de 2007 =)

Aunque lo bueno empezó el viernes, paso directamente a la noche del sábado, un salto y estamos dentro del Palacio de los Deportes, cogiendo posiciones para ver al más grande, con la mochila a cuestas y más de dos horas por delante de dar saltos y cantar a gritos.

Sobre Quique González, mejor espero a que Shura cuelgue algo en AchoRock me remito a lo que ha contado Shura en AchoRock... XDD que a él, EL fan, se le da mucho mejor hablar de esa parte XDD

Sobre Fito, así, en resumen...
*Pedazo comienzo con Un buen castigo!! Sin duda uno de los mejores temazos que tiene!!
*También muy buena la presentación de todo el equipo con la proyección de los dibujos animados, quedó chulísima!
*Tocó casi todas las buenas, desde Rojitas hasta Acabo de llegar, que cerró el concierto (aunque algún temilla sí que echo en falta, sobre todo de los primeros discos. Como todo, en los comienzos siempre es muuuuucho mejor ;)
*Rojitas, Trozos de cristal, Qué divertido, El funeral, Cerca de las vías... regalitos para los que le conocemos desde mucho antes de La casa por el tejado
*Fito siempre será el mejor, pero... Deltoya... mejor con la voz del Robe!! XDDD
*Y Abrazado a la tristeza mejor con Extrechinato, aunque me gustó mucho el detalle de la guitarra pintada (me da pena que se admire el valor en la batalla...... nananana......)
*La próxima vez nos arrancamos nosotros con Fito se hace pajas!! XDD Seguro que si lo oye, canta Marimadalenas...

En realidad no conseguimos ninguno de nuestros objetivos iniciales: ni llegar a primera fila, ni conseguir una púa, ni tocarle el brazo a Fito... XDD Pero mereció muuuuucho la pena!! =D Me gusta mucho la crónica que han hecho en La Vanguardia (aunque creo que es de EFE), así que os recomiendo que la leáis aquí (más objetiva que este post, jeje). También merece ver la que ha publicado El País, que incluye un vídeo en el que se le oye cantar un poquito! Y otro vídeo más de Por la boca vive el pez en el concierto, también de El País XDD

Más cosas del finde de fin de año, sin duda hay que hablar del ensayo de las uvas...


entre tanto caos conseguimos vernos todos (para perdernos diez minutos después, eso sí), llegar hasta delante del reloj, oír las campanadas y comernos las uvas, así que fijo que vamos a tener muuuucha suerte el año que viene!! =)

Y lo mejor del finde de fin de año.... ¡¡me lo guardo!! Las cosas buenas hay que guardarlas bien, no sea que se pierdan! ;) En unas horas, nochevieja y, uvas de por medio, año nuevo. Este año paso de quemar lo malo, guardar lo bueno y pedir deseos: seguro que 2008 va a ser un buen año!

¡¡FELIZ AÑO NUEVO!!
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¡FELIZ NAVIDAD!


Por un beso robado a la mañana
por una mañana con chocolate con churros
por el desayuno compartido con los amigos
por los amigos que siempre están en ese lugar
por el lugar tranquilo del mundo donde respirar
por respirar la libertad en el viento
por el viento insumiso que nos empuja
por el empujón que te llevó a decir te amo
por el amor a toda persona
por las personas que se cuelan por los huecos
por los huecos que destruyen las fronteras
por las fronteras derrumbadas por los sueños
por los sueños naranjas que mecen las cunas
por las cunas donde duerme el presente
por el presente que construimos con estas manos
por las manos arrugadas de nuestras abuelas
por las abuelas que encienden el fuego
por el fuego que calienta los cuentos
por los cuentos que despiertan a las hadas
por las hadas que viven en nuestra imaginación
por la imaginación que descubre nuevos caminos
por los caminos que pisaron tus doloridos pies
por los pies que nos llevan al borde del mundo
por el mundo que siempre es sueño de Dios
por Dios que acaricia con mis ojos
por los ojos que revelan el Reino
por este reino que es de los más pobres
por los pobres que llenamos el mundo de colores
por los colores que dibujan en los cuadernos de los niños
por las niñas que redescubren cada mañana el sol
por el sol que alumbra nuestros saltos
por los saltos que celebran la alegría de la vida
por la vida que nos regala una familia
por las familias que no son de sangre
por la sangre que hierve en nuestros corazones
por los corazones que son sensibles...

por todo esto...

¡¡FELIZ NAVIDAD!!
El poema es de Roberto Borda
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Morder


La vida es algo que hay que morder
y en cada boca tiene un sabor

y yo, que siempre voy detrás de un error
que canto a lo que nunca tendré,
al beso que ella nunca me dio...
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Milán


La soledad desde los pináculos blancos del Duomo se vuelve majestuosa, como el edificio mismo. Subo aquí a menudo, porque el viento que se cuela entre la piedra tallada trae olores medievales y hace que el mundo se transforme bajo mis pies. El silencio de estos muros es más fuerte que el jaleo de los flashes de los turistas incansables: también ellos se quedan mudos ante tanta inmensidad. Es como si la mirada fija de las gárgolas les robara la voz.

Cada vez que uno de ellos pisa por primera vez alguna de las terrazas se funde un poco con la catedral. Los hay que se convierten en alguno de los ornamentos, una flor, o unas hojas de parra, o una cabeza (imposible saber si es de ángel o de demonio o de dios o de dragón) con la boca abierta y los ojos fijos en el horizonte. Otros, se vuelven ese horizonte, lejanos y ajenos a todo, como si hubieran conseguido escapar del mundo conocido para dar un paso más, para llegar más lejos, para estar por encima del resto del mundo. Los hay que se transforman en una vidriera vista desde fuera, insertada en piedra y metal. Y abren los ojos como si pudiesen abarcar siquiera una mínima parte de lo que el Duomo es en realidad. Y hay quien se vuelve baldosa, insignificante y pequeña ante tanta belleza y ante tanta inmensidad.

Cuando yo descubrí este lugar supe enseguida en qué me había convertido: fui uno de los huecos de los arbotantes que se abren majestuosos desde todos los puntos de las terrazas. Los pulmones se me llenaron de un aire helado y sentí el viento soplando dentro de mí. Allí, entre las puntas afiladas de los pináculos, en algún espacio en tierra de nadie entre el cielo y el suelo, me sentí tan vacío como aquellos huecos de los arbotantes, rodeados de belleza, parte de la belleza tal vez, pero simples agujeros al fin.

Tuve muy claro que aquellas terrazas labradas con miles de esculturas serían para mí un refugio de aire, como un contrafuerte que ancla los muros al suelo. Y paso horas muertas mirando a la ciudad triste y gris camuflado entre las ojivas de las ventanas y entre los ornamentos vaciados en el mármol de sus parteluces, buscando un rayo de sol que se cuele entre las tracerías de las vidrieras. El trajín abarrotado de las galerías de moda de Milán se convierte en soledad entre el mármol blanco del Duomo. La soledad del Duomo es lo que siempre me hace volver a él.
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Cuando prohíban los besos



Puede alegar lo que quiera en mi contra, señoría, y sacar el Código Penal entero. No me declararé culpable por mucho que lo digan las leyes. Si me pide que confiese, lo haré, seré sincera: sí, le besé. ¿Podía acaso no hacerlo? Usted lo ha visto. Ha mirado en sus ojos la forma en que él mira en los míos. Ha comprobado el brillo de su sonrisa, el calor de sus manos, los latidos en su pecho. Tiene todo tipo de pruebas de su amor traspasándome el cuerpo y partiéndome en dos. Y hay evidencias de que no es un amor premeditado. Que la sentencia aclare ese punto, señoría: hubo beso, y reiteración del beso, y deseo de más besos, y demanda de otros besos, e incluso un beso más aún. Sí, le besé. Sí, me dejé besar. Sí, en plena calle. Sí, en reiteradas ocasiones. Sí, lo repetiría. Aquí y ahora, en cualquier momento, ante usted, señoría, ante todo el tribunal. Reincidiría, sí, y reincidiré. Volveré a besarle si salgo libre. Porque... ¿qué sentido tendrá la libertad cuando prohíban los besos?


La noticia: en Alemania pretender prohibir que los menores se besen en la calle
El cuadro: El primer beso, de Adolphe-William Bouguereau (1873)
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Ahora sí...


... parece que ya empiezo a entender... nanana.... nanana...

¡¡Se acerca el gran día!!


Yo ya no tenía ninguna esperanza de ir a ver a Fito, menos mal que Sarg está en todo! ;-)

¡¡Quedan 16 días para el gran evento!!

16 días para volver a vibrar, a saltar, a sentir la música dentro. 16 días para volver a cantar hasta quedarnos mudos, para sentir el calor de las guitarras, para ver otra vez los focos. 16 días para que se nos pongan rojitas las orejas, para buscar la lucecita que ilumina los sueños locos, para campar por las nubes de tu pelo, para mirar tus ojos del color de la cocacola...




16 días para el concierto de Fito&Fitipaldis...


¡¡Empieza la cuenta atrás!!
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Due billeti di andata e no ritorno


Desde que subimos al cielo para llegar a Milán (incluso antes), hasta el domingo por la tarde, tengo la sensación de que estuvimos realmente en las nubes, y sigo prefiriendo que el billete hubiera sido de no ritorno.

El viaje ha sido mágico, por todo. Porque las distancias son más cortas según el medio de transporte que se use, y no según los kilómetros. Porque he caminado sobre el tejado gótico de la tercera catedral más grande del mundo. Porque he paseado bajo un techo de cristal y he pisado el toro que me llevará de vuelta a Milán. Porque un café de Gucci cuesta lo mismo que quince cafés normales.

Porque los castillos de cuento, con foso incluido existen todavía. Porque un candado en un parque se convierte en un corazón. Porque la pizza cuesta dos euros y la cerveza se bebe en birrificios. Porque un crepe de nutella sirve de desayuno y de comida.

Porque en la arena de Verona aún pelean los gladiadores, y en el balcón de Julieta aún se besan los enamorados. Porque andando sobre 2.100 años de historia he visto ponerse el sol a las cinco de la tarde, sobre la ciudad y sobre el río. Porque por viejo que sea el metro, siempre llega a Lambrate. Porque un erasmus en Italia es capaz de multiplicarse por seis y seguir siendo mientras él mismo.

Porque el colacao tiene el mejor olor del mundo. Porque madrugar puede ser agradable si el despertador es dulce. Porque esperar el avión de vuelta es siempre mejor que esperar el tren de vuelta.

Dejo unas fotillos para dar algo más de envidia. Tengo en mente un par de cuentos, si salen cuelgo alguna más...

Ciao!!
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...a volar


y tú te vienes a volar
conmigo...


que yo te daré alas
si tu me das abrigo...



El desván del duende


...volando a Milán...
¡¡hasta el lunes!!
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¡¡¡Marujita & Parada!!!


¡¡¡Sí, sí, sí!!

No me gusta que mis fotos anden dando vueltas por internet, y tampoco me gusta colgarlas por aquí, pero este es un documento gráfico que debe ser lanzado a los cuatro vientos para que lo conozca el mundo!!!

Los auténticos, los genuinos, Marujita y Parada!!! Con nosotras!!

Si es que somos las mejores!! XDDD


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Cuentas


No me salen bien
las cuentas
de la vida....


o me sobran noches,
o me faltan días...
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Tiempos y relojes


...la semana más larga de la historia...
¡¡quiero acelerar el tiempo de nuevo!!



El tiempo corría tanto, que deseó romper las horas, multiplicar los días, tener otro minuto más para disfrutar del momento, para escaparse de todo y de todos, para huir de la locura del correr de cada instante.

Romper el reloj le pareció la mejor idea del mundo y, para no perder más tiempo, se lo arrancó de la muñeca y lo arrojó contra el suelo. La piel más blanca en esa zona brilló por un segundo, el último segundo. Y luego el reloj se paró y con él se pararon las horas.

Respiró en silencio. Miró su reloj parado, su tiempo inmóvil, su vida quieta. Y deseó que el reloj funcionara acelerado de nuevo.
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Abismo


No puedo volar más alto que yo mismo,
no puedo mirar sin vértigo al abismo.
Ya nadie podrá arrancarme tu media parte.
No puedo sin ti, no sé como olvidarte



Pero si tú sí estás aquí
y si te quedas junto a mí
te llevaré volando y subiremos
alto hasta las nubes...



Sin vértigo
El desván del duende
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Sin preguntas



Me quedé con la respuesta y he olvidado todas las preguntas. Borré las interrogaciones del miedo y los puntos suspensivos de las dudas. Un paso al frente, y una sonrisa, con la solución al problema apuntada en un folio amarillo, la fórmula que convierte la ecuación en un simple cuento para niños. Pasé la mano por la pizarra y borré el insomnio blanco de las noches de tiza. Y el sueño hizo desaparecer el cansancio de la incertidumbre. Dejé de ser un examinador inquieto, un periodista intrépido, un cotilla de patio de colegio. No hizo falta volver a preguntar, tu mirada lo dio todo: una respuesta, la respuesta, tu respuesta. Sin preguntas.


¡¡¡Leed más en LA LUZ OSCURA!!!
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La cuadratura de tu círculo


"
Al cruzarse, el círculo se enamoró del cuadrado y el cuadrado del círculo en una suerte de flechazo geométrico. Movido por una pasión desmedida, el cuadrado comenzó a acariciar la curvatura del círculo y éste le correspondió besando cada ángulo, cada arista, hasta adentrarse al fin en el epicentro de su área. Nueve meses después, nació una línea recta como muestra de su amor infinito.

Este cuento bien podría representar la intención de algunos científicos por encontrar una fórmula matemática que defina el amor. Una fórmula imposible de resolver si tenemos en cuenta la cantidad de incógnitas que sugiere. Las lágrimas, por ejemplo, jamás pueden ser fielmente representadas por su masa, o su volumen. Y los besos, tampoco. Quien se empeña en despejar la x, o la y de una pareja, en realidad está incitando al suicidio masivo de nuestros sentimientos. Si pudiéramos cuantificar mediante números cuánto nos queremos, perderíamos el último resquicio de magia que nos queda. No necesito que me quieras en grado 73 sobre 100. Sólo te pido que me quieras. Que me ayudes a olvidar la cuadratura de tu círculo.
"


Dando una vuelta en un taxi me he encontrado con este cuento tan precioso. Hace tiempo que sigo Ni libre ni ocupado, por lo bien escrito que está y por las cosas tan curiosas que cuenta. Hoy no me he podido resistir a copiarle esto.

El cuento porque me ha parecido demasiado real como para ocultarlo, demasiado verídico el cruce del círculo y el cuadrado y como se convierten en la misma cosa sólo porque están enamorados, sólo porque así es el amor.

Y la explicación del cuento porque contiene una de las declaraciones de amor más bonitas que he leído en mucho tiempo

Sólo te pido que me quieras. Que me ayudes a olvidar la cuadratura de tu círculo.

Y porque opino como él: el amor es el único resquicio de magia que nos queda...

Lo bueno de internet es que de vez en cuando, después de mucho buscar, encuentras premios como este.

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¿Enfermedad terminal?


El virus se ha hecho fuerte, y el ordenador muere cada día más. Siento dar la lata con este tema de nuevo, pero es que estoy triste, porque veo llegar una muerte inminente de todos mis documentos, almacenados ahí desde hace cinco o seis años, y no sé que hacer. Estoy en un proceso de grabado de cosas, por si hay que hacerle una operación a corazón abierto y al salir del quirófano ha perdido la memoria, pero me asaltan las dudas:

* ¿Ese monstruo infame que se multiplica por minutos se va a grabar también en el CD para volver a multiplicarse luego?
* ¿Cuándo una foto se infecta, la gente que sale en ella se pone triste, como si le hicieran vudú?
* ¿Y cuando se infecta un cuento le salen faltas de ortografía?
* ¿Si pierdo mi currículum perderé mi trabajo?
* ¿Y si pierdo mis fotos perderé mis recuerdos?
* ¿Y si pierdo mi música me quedaré sorda?
* ¿Y si pierdo la carpeta que se llama "Trabajos Uni" me quitan el título? ¿O se borra mi foto de la orla?
* Y (la pregunta del millón) ¿qué hago cuando acabe el proceso de grabado de cosas? (es lo que tiene no ser médico, que tienes que operar cuando lo más que sabes es que el catarro se cura con frenadol y reposo :S )

En realidad este post es para dar las gracias a Abel, Sarg, Mery y Shura por sus comentarios en el anterior... aunque casi todo me suena a chino, por lo menos me ha quedado claro que el virus es chungo chungo XDD

Y que yo tampoco quiero formatear!!! :’( ainssssss

Y... bueno... esto... para plantearos que... ¿si os invito a merendar os pasáis todos por mi casa y lucháis contra el monstruo hasta vencerlo definitivamente?? XDDD (eh, eh, que la merienda me la curro, prometido, os hago tarta, o trufas!! XDDD ...... no cuela, no? XDDD lo suponía... XDDD

En fin, me niego a pensar que la enfermedad es terminal, así que esta tarde intentaré seguir salvando partes.

¡¡Deseadme suerte!!
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1.273 virus encontrados


Y no es coña. Al menos, eso es lo que dice el super antivirus que nos ha conseguido el santo informático y paciente Abel. Por suerte, casi todos están ya destruidos. Sólo quedan 217 monstruitos malignos ahí dentro, con los que espero acabar esta noche (creo que acabar ayer a las 2:16 de la madrugada era demasiado como para seguir con la cura intensiva). Pobre ordenadaor. Moribundo y yo por ahí sin preocupación ninguna. Menos mal que se está curando, sería una gran pérdida (de fotos y cuentos, más que nada). En cuanto vuelva a estar sano y fuerte como siempre, os enseño alguna fotillo del último viaje, para dar un poco de envidia. Paciencia. Como la mía de ayer (los mil y pico virus hay que ir matándolos uno a uno). Que esto debe ser (ni idea de medicina de ordenadores) como el catarro: o te curas bien o recaes (y de esto sí hablo con conocimiento de causa). Y si enchufo la cámara, se me contagia, y no quiero más cacharros enfermos, que luego curarlos es un rollo
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La maleta


Que no se me olvide el secador. Al fondo metí las toallas, ¿verdad? Una grande para la ducha, otra pequeña para la cara... y la de playa. Dos bikinis. Y las chanclas, que no se queden aquí. Aunque no sea verano, por si acaso, nunca se sabe donde puedes acabar. ¿Tres vaqueros y una falda o meto los pantalones negros? Mejor meto los cuatro, y otra falda más. Y todas las camisetas, también la negra, por si salimos por ahí. Y jerséis, que aunque sea el sur, hará frío, lo mismo incluso llueve, voy a meter el paraguas. Y si llueve, mejor llevar las botas, y me sirven también para las faldas. Luego no me acordaré, voy a meter las medias ya. ¿Me llevo la americana de pana? Sí, y el jersey de cuello vuelto, quizás haga mucho frío. Tendré que meter bufanda y guantes. Pero eso luego, voy a pasar al neceser (cepillo -de dientes y del pelo-, pasta, jabón, champú, colonia, maquillaje, las pinzas). Y el líquido para las lentillas. Y la pasta de dientes. Y la crema hidratante. Y el brillo de labios. Y un espejo. ¿Por donde se sigue esto, que me estoy dejando aquí?
Solo falta el pijama, pero hace rato -más o menos desde que metí el abrigo- que esto no cierra... a ver, vamos a organizarlo otra vez, todo fuera. Y a descartar cosas. Pero que no se me olvide el secador. Ni las toallas. Ni el pantalón negro. Definitivamente, es hora de comprar otra maleta.


[hasta el domingo en Córdoba y Sevilla.
Sed buenos.
Cuidadme el blog]
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Sol de invierno


Aquí estamos los dos...
en una calle, besándonos,
esperando el sol de invierno...



abrazándonos...
aquí estamos los dos...
esperando el sol de invierno...

Sol de invierno
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Las calles de Víctor


Cuando la espera ha sido demasiado larga y las calles se han vuelto demasiado frías, todo puede parecer un laberinto o un puzzle de mil piezas a medio hacer. Víctor ya lo sabía cuando se encaminó hacia la plaza Mayor, sabía que se quedaría preso de sus soportales, perdido entre la niebla volátil de las tardes frías de noviembre. Sin embargo, a veces el destino no se puede elegir, igual que no se elige la temperatura de las calles.

Dejó atardeciendo los jardines de la plaza de Oriente y eligió pasear hasta el centro dando un rodeo. La catedral siempre le había parecido un capricho, algo que no debería estar allí, un antojo de Felipe II puesto en marcha por Alfonso XII, pero era la referencia donde girar a la izquierda para encontrarse con la calle Mayor.

Las calles no son del mismo color para todos, es un fenómeno curioso. Cuando Víctor se enfrentó de nuevo con aquella cuesta arriba sintió una sensación de gris. Para ser la calle Mayor, se abría oscura ante sus pies, como vacía. Tal vez incluso más fría que el resto de la ciudad. Aunque el calor de las calles, igual que el color, depende de los pies que las pisan, de los ojos que las miran.

Caminó despacio, con el cuello hundido en la chaqueta y las manos en los bolsillos. Cuando Víctor entraba en aquel estado de duermevela, de dejar atrás bocacalles sin fijarse en los azulejos que tienen dibujado su nombre, la gente, inevitablemente, desaparece a su alrededor. Aunque tal vez la calle Mayor ya estuviese así de sola antes de que él llegara. A su paso por la plaza de la Villa solo se le ocurrió pensar que una ciudad tan grande no se merece una plaza tan poco lucida. Tal vez fue eso lo que le hizo seguir calle arriba, en línea recta, hasta la Plaza Mayor.

Sol a lo lejos es un hervidero de vidas dispares, un poco incomprensibles. Como otro universo, como otro mundo que no pudiera ser el mismo que el del vacío bajo sus pies. Como no podía ser de otra forma, Sol es amarillo, aunque Víctor no supo decir si era por el reflejo de la bola del reloj, por los destellos de la gente, cruzando de un lado a otro a la velocidad de la luz, o por un rayo del metal dorado que se incrusta en el kilómetro cero. En realidad da lo mismo. Víctor siempre había preferido la relativa clama naranja de la plaza Mayor.

Cometió el error de quedar atrapado en sus pensamientos, y no pudo ver por cuál de los arcos que rodean la plaza había entrado. Bajo la estatua ecuestre, tan anacrónica e inútil como el resto de las estatuas, tan incómoda como todos los pedestales, se sintió en mitad de un laberinto rojo sangre, y no tuvo fuerzas para salir. La humedad que le subía por los pies le recordó que el rectángulo de adoquines, aún sin tener un arco de salida, casi siempre regalaba un destino concreto o un encuentro casual. Y se preguntó de qué color sería la plaza para el resto de sombras que aparecen allí, tan perdidas como él.

Paseando por mi laberinto de baldosas desdibujadas -calientes para mí-, convencida de que todos los arcos de salida estaban cerrados, me encontré de lleno con los ojos perdidos de Víctor. Supe enseguida que tenía los pies húmedos, como el alma, y que había deambulado sin rumbo, calle arriba, sin fijarse en los nombres de las calles, envuelto en una nube gris. Sin duda, también me había estado esperando un buen rato. Todavía con la niebla envolviendo la plaza y la temperatura del asfalto sin templar, Víctor me reconoció también. El camino de baldosas amarillas comenzó a dibujarse lentamente bajo nuestros pies.
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Standby


Vive mirando una estrella
siempre en estado de espera...
quiero fundirme en tu fuego
como si fuese de cera...









Me da vértigo el punto muerto
y la marcha atrás,
vivir en los atascos,
los frenos automáticos y el olor a gasoil.
Me angustia el cruce de miradas
la doble dirección de las palabras
y el obsceno guiñar de los semáforos.

Me da pena la vida, los cambios de sentido,
las señales de stop y los pasos perdidos.
Me agobian las medianas, las frases que están hechas,
los que nunca saludan y los malos profetas.
Me fatigan los dioses bajados del Olimpo
a conquistar la Tierra
y los necios de espíritu.
Me entristecen quienes me venden clines
en los pasos de cebra,
los que enferman de cáncer
y los que sólo son simples marionetas.
Me aplasta la hermosura de los cuerpos perfectos,
las sirenas que ululan en las noches de fiesta,
los códigos de barras,
el baile de etiquetas.
Me arruinan las prisas y las faltas de estilo,
el paso obligatorio, las tardes de domingo
y hasta la línea recta.
Me enervan los que no tienen dudas
y aquellos que se aferran a sus ideales sobre los de cualquiera.
Me cansa tanto tráfico y tanto sinsentido,
parado frente al mar mientras que el mundo gira.


Francisco M. Ortega Palomares



{Vale, lo reconozco, os lo he robado de Achorock... pero es que no conocía la canción con esta poesía antes, y no puedo parar de escucharla. Será porque también vivo un poco así, en standby, en estado de espera... o porque soy impaciente y no me gusta esperar, o porque no me esperaba a una señora tan mayor en el videoclip, o porque me gustaría estar parada junto al mar mientras que el mundo gira, y no girando más deprisa que el mundo y muy muy lejos del mar. En cualquier caso, esta canción es de mis favoritas, ya era hora de que apareciera por aquí.

Se la dedico a todos los que esperan. Y a todas las esperas que merecen la pena}
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Magia


...pero a veces las cosas no se saben o no se pueden explicar. Y algunos dicen que eso es la magia. Si eso ocurriese ahora, aquí, ante tus ojos, si no hubiese ninguna otra explicación digna de aceptarse, eso podría ser magia sin más. A veces la magia es solo un truco, pero un truco puede explicarse, puede aprenderse, se puede practicar, ensayar y mejorar. Y un truco puede incluso fallar. Sin embargo, la magia no falla. Y tampoco se enseña, ni se aprende, ni se practica, ni se mejora. Porque es magia. Y de entre todas las magias, la más real y la más innegable, es la magia que llamamos amor. ¿O acaso alguien tiene una explicación para el amor? ¿Puede alguien explicar por qué cuando cierras los ojos por las noches, inevitablemente, antes de dormir, piensas en él? ¿O por qué te parece más guapa que la modelo mejor cotizada? ¿Por qué su cuerpo desprende más calor que cualquier manta? ¿Por qué sus labios saben a azúcar cada mañana? ¿Por qué su mirada es capaz de calmar todos tus miedos? ¿Por qué aún te pones nervioso cuando suena su voz al otro lado del teléfono? ¿Por qué una palabra, un gesto, el más leve movimiento te puede hacer feliz? Es amor. O magia. Lo mismo da, porque ambas cosas son lo mismo. Así que es muy fácil saber que la carta que elegiste, la que sacaste de la baraja al azar, y tuviste oportunidad de cambiar, la que enseñaste al público y guardaste entre tus manos todo este tiempo, es el as de corazones. ¿Cuál otra podría ser, que representara mejor la magia, que representara mejor el amor?
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¿¿Ahora qué??


...mierda de injusticias laborales...
·
·

AHORA
.....................que gritamos

y casi nadie escucha...................

................AHORA

que el silencio......................

..................lo dice casi todo...

¿¿¿Ahora qué???
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Labios (al trasluz)


...como un beso puesto al trasluz...



Tus labios de incógnita, que se me escapan, que me rehuyen, que se desvanecen sobre mi almohada vacía al despertar cada mañana. Tus labios suaves y ocultos, fugaces, voraces, despiadados, seguros. Tus labios de sueño, de ficción fingida, que nadie sabe hasta qué punto existieron y hasta qué punto fueron un destello deslumbrante del sol. Tus labios de excesos que ríen, que mienten, que guardan tu sangre, que burlan mis pasos. Tus labios dejando al trasluz mis besos, escapando a mis palabras, olvidando aquel pasado, mi pasado y todos los pasados. Tus labios de futuro, que se comen el presente, que me dejan hambrienta de otro beso, de esos labios, de tu boca, de tu cuerpo, de tu cuello, de otro beso otra vez más. Tus labios que se esconden. Y mis labios, que no paran de buscarte.
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Déjame...



Déjame que sea el dueño
de tu boca de aguardiente,
de tus gritos en caliente,
de este amor a bocajarro...


{Poncho K}
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Otra noche (cae)



Dame, calla, siente, ten.
Dime, escucha, duerme, cuídate.
Ríe, para, sigue, rómpeme.
Toca, huele, muerde, se.

Grita, sopla, mira, trae.
Rasga, arranca, mancha, bésame.
Piensa, corre, huye, quédate.
Gira, vuela, suspira, cae.

Contigo, mañana, otra noche. Ven.
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Las calles de Nora


Las calles no están igual de heladas para todos, es un fenómeno curioso. Cuando Nora bajó del autobús en mitad de la plaza de Callao, le pareció que el frío le cortaba las mejillas, pero fue solo un instante. Después, el ruido y la gente y el humo la envolvieron de nuevo y un calor seco, ese calor de lejos del mar, la atrapó otra vez. Aún así, el sudor que le bajó por la columna vertebral era frío, tan frío como el aire de una tarde de noviembre como aquella.

Preciados abajo, entre bolsas de papel, vendedores de humo e hilo musical de olor peruano, el tiempo parecía esfumarse y se hacía pequeño entre los escaparates. Cuarenta y ocho empujones después, el reloj que en lugar de horas marca años brilló ante sus ojos. Cruzar la plaza es otra odisea, hay que quitarse la bufanda y desabrocharse el abrigo, porque las prisas suman más y más calor a la lejanía del mar.

Luego, sobre la baldosa que señala el kilómetro cero, vuelve a hacer frío otra vez. Será porque es el punto de partida, o tal vez porque todo está un poco más lejos desde allí. La otra opción es la maraña de gente que espera sobre la baldosa de medio metro cuadrado, y que siempre está sola. Quedar en el kilómetro cero es saber que nunca llegará la persona que esperas. Nora también lo sabía, lo había sabido siempre y aún así, cruzó deprisa la calle entre pitidos de coches y aspavientos de agentes de movilidad.

Inmóvil bajo el reloj, con las manos en los bolsillos y los hombros encogidos pensó una vez más, como primer día que pisó la plaquita de piedra y metal, que Madrid es igual de día y de noche, con más bombillas de noche, con menos turistas de día. Como un hormiguero en el que todos tienen prisa. Y con diferentes temperaturas en las calles, según quien las pise cada vez.

Cuando suenan las campanadas de en punto, espera a las de y cuarto, y cuando suenan las de y cuarto decide esperar hasta las de y media. Pero suenan las de y media, las de menos cuarto y las de en punto otra vez, y de tanto entrar y salir y dar vueltas a la placa, la acera se está desgastando, así que, con cara de circunstancias, camina despacio en dirección a la plaza Mayor.

Sin motivo aparente, tal vez porque la plaza es el extremo opuesto al kilómetro cero, porque allí siempre encuentras a quien buscas. O por lo menos, es seguro que vas a encontrar una mirada, un olor a castañas asadas entre las voces multicolores de los turistas o, por qué no, una caricatura de tu vida envuelta en papel de dibujo de mala calidad. Seguramente por eso Nora caminó aturdida hasta allí.

Como el resto de las calles, la plaza Mayor no tiene la misma temperatura para todos y depende de los pies. Los de Nora la sintieron húmeda y caliente, como el vapor de agua. Y ese vapor lo envolvía todo, y lo hacía borroso a la vista. A veces pasa, en las noches de noviembre como aquella -porque las tardes en invierno duran tan poco que es de noche de repente-, que esa niebla indescriptible absorbe la plaza Mayor. Así que es imposible salir de ella: el rectángulo se convierte en un laberinto inmenso de baldosas resbaladizas, todas idénticas: no hay camino de baldosas amarillas para escapar.

Paseando por mi laberinto de baldosas húmedas -frías para mis pies-, sin contar ya con encontrar alguno de los arcos por los que se sale de la plaza, me encontré con los ojos vidriosos de Nora. Supe enseguida que sus pies estaban calientes, que había esperado sobre el kilómetro cero, que se había desabrochado el abrigo al cruzar la plaza, que había mirado el reloj que cuenta años en lugar de horas. Sin duda, era a ella a quien había estado esperando. Todavía con la niebla a medio disipar y los caminos del laberinto de la plaza confusos, Nora me reconoció también. La temperatura del asfalto se volvió agradable bajo nuestros pies.
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Tu ombligo


Medio metro entre nosotras y Chaouen en un conciertazo medio acústico (el otro medio con la banda) con los temazos de siempre y con muchas canciones nuevas (ya no le puede quedar mucho al disco, ¡¡seguro!!).

Él bromea sobre un "repertorio alternativo" y pide que le hagamos una lista de treinta canciones para que las cante en el próximo concierto así que, como nadie se arranca, nosotras cogemos un folio y hacemos la nuestra. En dos pasos estoy en el escenario, y se la dejo al lado del cubata... ¡¡ahí la ve seguro!!


El concierto se acaba, y Carlos se va sin nuestra lista. Encienden las luces, la gente empieza a levantarse... pero aparece de nuevo en el escenario y toca un tema más.

No sé si tuvo o no que ver, pero Tu ombligo fue la primera que pusimos en la lista...


No estoy bien en ningún sitio y nadie entiende lo que digo
yo preparo mi equipaje
y me adentro en tu ombligo...

No te vayas de mis manos aunque te mueras de frío,
porque cuando llegue el alba no soportaré el rocío....

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Diamante


Que Fito es grande no es ninguna novedad. Ya lo era con Platero y Tú, el que para mí sigue siendo el mejor grupo con diferencia, y lo es ahora con los Fitipaldis. Por eso, y porque ha vendido un montón enorme de discos, ayer le premiaron con un Disco de Diamante.


Y estos ojos que no dejan de mirar a Fito (¡¡y que le deben a él su nombre!!) no podían dejar de comentarlo =D

¡¡Enhorabuena, maestro!!

De regalo, os dejo el enlace a su web oficial, para que veáis alguna cosilla de él...


... una entrevista chula que he leído esta mañana en 20 Minutos...
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Y este vídeo, que es el de la primera canción que oí de Fito & Fitipaldis, y con la que me hice adicta a ellos ;)


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...el mejor...



El mejor de los pecados,
el haberte conocido...
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Cuatro pies


Cuatro pies se deslizan deprisa por la tarima de madera, como si volasen, como sin esfuerzo. Cuatro pies al unísono, como otra nota de la melodía, encajando cada paso con un golpe, aferrados al ritmo y girando una vez más. Cuatro pies con tacones que se olvidan del dolor, que se convierten en música, que dejan el mundo fuera del escenario, y lo convierten en público mientras pisan el pasado, mientras se pierden en un bucle del presente. Cuatro pies que se unen a unos cuerpos convertidos en partitura, aferrados uno al otro, fundidos mano a mano en su vaivén. Cuatro pies que son ahora cuatro negras en la misma línea del pentagrama, cuatro pies que se separan y se juntan afinando cada acorde. Cuatro pies que son parte de la música, hasta que la música se convierta en silencio, y los pies vuelvan a ser parte de un humano más.
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...tus pies bailan un tango
con mi pasado...
{Sabina}
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Círculos de arcoiris


La pantalla del ordenador está llena de círculos de arcoiris: es la señal inequívoca de que, un día más, lleva demasiadas horas sentado ahí delante, inmóvil, con los ojos como platos -como platos que tuvieran pegados restos de comida reseca, eso sí. El cuello como una piedra es la prueba irrefutable de que necesita levantarse y correr durante horas. El tema de los ojos va aparte, demuestra simplemente que dormir sí es imprescindible. Otro trago a la cocacola, que se ha quedado sin gas y que ni de lejos espanta ya al sueño, y de nuevo clava los dedos en el teclado que le devuelve un eco sordo demasiado repetido a estas horas ya.

"Media hora más y lo dejo". Lo mismo pensó a las seis de la tarde y, aunque sabe que es mentira, a todos nos gusta engañarnos de vez en cuando, como si no fuéramos conscientes de que esa mentira no se va a cumplir. Y en un parpadeo la media hora se ha esfumado, pero la pantalla sigue en el mismo punto, ni un cambio, ni un avance, seguramente algún círculo de arcoiris de más.

Lo más grave, sin embargo, no son los círculos de arcoiris, ni la espalda resentida, ni los hombros cargados. Lo más grave, aunque no quiera reconocerlo, aunque no sepa descifrarlo, es que ha muerto la capacidad de pensar, es que los dedos ya no marcan letras en un orden lógico, es que las horas se consumen solas, a cada parpadeo, una hora más.

Pero se da otra media hora, otra oportunidad, un penúltimo intento, seguramente fallido también, para terminar aquello que empezó, no recuerda bien cuándo ni por qué. El ring del teléfono se escucha distante, como si no fuera real, como si fuese menos cierto que las letras borradas del teclado, que las marcas de sus gafas a los lados de la nariz, que esos malditos círculos de arcoiris que se posan por la pantalla sin clemencia. "No lo cojo, que me entretienen". En el mismo segundo se activa el contestador...

"Oye... tío... hace días que no apareces por aquí... A mí me da igual lo que hagas, pero, oye, no puede ser bueno trabajar tanto... Ha llamado tu madre un par de veces, dice que habías quedado con ella, que no fuiste a comer... ¿No has comido en este tiempo, no? Tío, en serio, levanta de ahí y tomamos unas cañas..."

Y de repente comprende: comprende la rigidez del cuello, los pies dormidos, los ruidos en su estómago, su lengua de estropajo, los círculos de arcoiris. ¿Cuánto tiempo sin cambiar de posición, sin cerrar los ojos, sin mover las piernas? Y se acabó. No más medias horas más, no más, hasta ahí podíamos llegar.

Se hubiera levantado de un salto en ese instante, y hubiera arrojado la pantalla por la ventana para no verla más. Pero ya es demasiado tarde. Ya es parte de la oficina, como la mesa o la silla. Clavado al ordenador. De por vida.
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La guerra trae más guerra..


...pues eso:





Es un anuncio de Peace Reporter
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Ganas


Ganas de la risa, de escapar por la ventana y trepar por tu espalda y anclarme en tu cuello. Ganas de tus manos sujetando mis caderas, de tus ojos que me piden que me quede, de tus uñas que se clavan en mi espalda. Ganas de un susurro entre sueños, del sabor salado de tu sudor en mi boca. Ganas del silencio, de tu paz, de los hombros redondos, de tus brazos. Ganas de enredarme en tus lunares, de morderte las orejas, de aferrarme a tu saliva. Ganas de que lo envuelvas todo y lo abarques todo y lo llenes todo, y lo vacíes. Ganas de engancharme entre tus dedos, de un suspiro tranquilo, del sosiego al despertar. Ganas del olor de las palabras y del estruendo de los latidos de mi pecho cuando choca contra el tuyo. Ganas de arrasar la cosecha, de quemar las reservas, de consumir sin pausa todo el tiempo. Ganas, y yo pierdo esta batalla. Ganas de ti, de ti, de ti, de ti. Ganas y más ganas.
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Insomnio


Sé que esta noche no voy a dormir...


... y con la almohada empapada en sudor
contaré los minutos
¡¡qué lento andará ese reloj!!
·


·

·


...qué larga es la noche si esperas el día...

Los sueños que busco
no encuentro en la oscuridad

Platero
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Reflejos


Los ojos grandes y redondos, como dices que te gustan. El pelo negro cayendo sobre la frente, colocado estratégicamente delante del espejo a golpe de secador. La piel del color gris pálido que deja mi foto en blanco y negro. Y ese destello difuso de mi cuerpo semitransparente en el cristal de un escaparate al pasear bajo el sol. Es todo lo que te puedo decir de mí. Me he buscado para definirme y he mirado con detenimiento mis manos para describirte como soy. Un escalofrío me ha recorrido la espalda -esa espalda que, dicen, es ancha y deja en el centro un surco por donde pasa mi columna vertebral- al entender que todo lo que creía saber de mí no es más que un reflejo de lo que soy. Yo misma debería conocerme mejor que nadie y, sin embargo, ¿cómo saber qué ves tú de mí? Creer en mis ojos marrones, en mi sonrisa ancha y de labios gruesos, en mi nariz redonda, en mis orejas pequeñas es sólo un acto de fe. No he contado los lunares de mi cara, no he medido mi cintura estrecha ni he mirado de reojo los hombros redondos y lisos, con su cicatriz junto al omóplato derecho. No sé si es de verdad mi color dorado en verano, si mi cuello es tan largo como dicen o si tengo los pies grandes, los tobillos gruesos y las manos más o menos del tamaño que podrías esperar. Lo comentan, lo he oído y lo he buscado en los espejos del armario mientras me vestía -¿en serio me favorece ese pantalón?-, pero nunca me he llegado a ver. Me busco entre las cosas, me invento y me toco con las manos, pero sigo siendo un reflejo de la realidad. En mi mente hay dibujada una imagen de mí, pero ¿en qué se parece a la imagen real? No soy más que lo que tú me has contado que soy, soy un retrato en un marco de madera, una proyección en el espejo del baño cada mañana, unas palabras de mi madre, una foto de carnet. Soy esos ojos grandes y redondos, ese pelo colocado a golpe de secador, esa piel gris pálido de mi foto en blanco y negro. Y a pesar del esfuerzo, no puedo verme completa, no soy más que un reflejo de mí...
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AchoBlogs!!!


Voy a hacer un poco de propaganda una recomendación sobre una nueva red de blogs que acaba de aparecer en internet. Se llama AchoBlogs y hasta ahora está formada por dos blogs estupendos, uno sobre rock (AchoRock) y otro sobre cine (Último pase).





El proyecto acaba de nacer, y yo lo he estado siguiendo estos días y tienen muy muy buena pinta. Además, la red promete ir creciendo y añadiendo nuevos blogs a la lista.

Pues eso, que os recomiendo que le echéis un vistacillo, porque merece la pena =) =)



(um... esto.... achocreadores....
espero mi retribución por esta estupenda propaganda anuncio XDDD :P)
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Acuarelas


...la vida, como un paisaje pintado a acuarela, se diluía poco a poco y caía aguada sobre un lienzo inexpresivo. Colores pastel sin gracia y sin luz, y un tono monótono de principiante. Cuando la viste por primera vez, supiste que ella era la única salida, la única solución, la única capaz de cambiar las acuarelas por óleos y los tonos mate por el brillo del sol. Pintaste su cara y su pelo y sus hombros redondos y el lunar de su mejilla en cientos de tablas, y ninguna te acababa de gustar, le faltaba algo suyo, le faltaba su alma, le faltaba su luz. Se cruzaba una y otra vez por tu mente y yo te veía tratar de apartarla, y me hacía gracia ver como al final siempre la llamabas de nuevo y la besabas en silencio y sonriendo...

Acuarelas en el mar
los esbozos del pasado
y una herida al despertar...
ya no amanezco a tu lado...

[El desván del duende]
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Scary Mary


No recuerdo que la peli de Mary Poppins me diese especial miedo cuando la veía de pequeña. De hecho me daba bastante más miedo ETE. Y más pena. Pero... he cambiado de opinión. Un par de cortecitos en el thriller y un pequeño cambio en la música y... en serio, si algún día tengo niños, no contrato a una niñera con bolso gigante y paraguas ni de broma!!


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¿Dónde te has quedado?


...y así malgasto las horas
y voy quemando los recuerdos


me he bebido sus caricias...

¡¡y ahora me fumo sus besos!!
Gritando en silencio
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Cuerpo de artesanía


Dormía boca abajo y él dibujaba espirales de luna menguante en su espalda y jugaba con su pelo, incapaz de cerrar los ojos, no fuera que, como siempre había sospechado, ella solo fuera un sueño que se desvanece al salir el sol.
Allí, entre las sábanas, todo parecía demasiado perfecto: la curva de su cintura, las arrugas de su axila y aquel brillo dorado que le cubría los hombros. Pero, de tener que elegir, se habría quedado sin dudarlo un momento con los rizos negros que le cruzaban la espalda. Con su espalda, seguro, aún sin los rizos. Esa espalda donde dibujar espirales esperando la mañana. Tal vez aquellas espirales eran la única parcela de felicidad que recordaba en mucho tiempo. Y, por supuesto, no pensaba apartarse de su cuerpo y de su forma de dormir boca abajo.
Igual que sospechaba que era parte de un sueño, sospechaba casi siempre que la felicidad estaba indiscutiblemente atada a ella. Y seguramente era verdad. Seguramente eran verdad las dos cosas. Pero en aquellos momentos, con el sol apunto de romper el misterio de las noches y con el reloj apunto de romper la magia de tener un día más, no pensó en los sueños ni en la felicidad. Pensó sólo en como retener el olor que dejaba su risa, el calor de sus ojos profundos al despertarse y la forma de su cuerpo de artesanía grabado en las sábanas cuando ella se levantara y se dispusiera a partir.

Siéntate
a la altura de mis brazos
para que meza despacio
tu cuerpo de artesanía...

Poncho K
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Etiquetas: Cuentos edit post

Mordido



No digas que te he mordido,
déjame dormir contigo,
yo te juro por mis muertos
que te ronco despacito....
·
·
·
Kutxi--Desencuentro
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Luz Oscura


Un par de experimentos nos han llevado a Sarg y a mí a iniciar un experimento mucho mayor: acaba de nacer LUZ OSCURA, un blog de contradicciones y extremos, de blancos y negros que no pasan por el gris, de opuestos y de contrarios.


Porque en el fondo, todos sabemos que los extremos suelen estar bastante más cerca de lo que parece...

Aún no tiene casi nada, es como un proyecto, como un blog becario, pero seguro que pronto aparecen nuevos textos antagónicos.

Os recomiendo que os paséis por allí (claro, qué voy a decir yo! XDD).

Hay muchas luces por apagar y muchas sombras por iluminar...
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Etiquetas: Blogs, Experimento, Luz Oscura edit post
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Veo el ojo que me mira, no sé qué esperáis de mí. Yo que muero cada día que tú te olvidas de mí... Soy un pez en una jaula, lo que quiero y lo que no, soy todo lo que me pasa... Tú me ves, yo no... (Fito&Fitipaldis)

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