Orange Green Pink

El ojo que te mira

Caperucita (después del cuento)


Cada vez le llevaba más cestas a la abuelita, y eso que todos sabían que el bosque era un peligro. Por eso la madre se olió algo pero, claro, quién puede impedir el amor.
Al principio era los fines de semana. Luego empezó a ir también los martes, y los jueves, al final era casi a diario, siempre que no tenía exámenes.

Salía tapada con la capa, pero era evidente que debajo se ponía ropa que antes no usaba, vestidos, camisas que realzaban su talle, y un discreto toque de maquillaje. Caminaba despacio porque sabía que la madre miraba por la ventana, pero en cuanto doblaba la esquina aceleraba el paso, y se adentraba en el bosque al borde de la carrera, nerviosa y contenta a partes iguales.

Donde empezaba el atajo, allí la esperaba siempre el lobo. Tiraba la capa y la cesta unos metros antes y saltaba en sus brazos, fuertes y seguros, y se besaban en el aire. Las viandas para la abuelita podían esperar. En realidad, todo puede esperar en un momento así.

No me vengas ahora con lo de los amores imposibles. ¿Quién puede poner en duda un beso, por mucho lobo, y mucha niña, y mucha capa de felpa de cuento de hadas? A veces, la vida de después de una historia es así de loca, y así de real, y así de feliz.

foto
8 miradas | Lo ha visto Virginia Vadillo

Etiquetas: Cuentos edit post

8 miradas

  1. Reithor on 1 de septiembre de 2009, 15:26

    sorprendente :) Esta caperucita se nos desmadra...

     
  2. Paula on 1 de septiembre de 2009, 15:55

    Nadie podría ponerlo en duda. Bonita moraleja, y mejor cuento :)

     
  3. Nahus on 1 de septiembre de 2009, 23:05

    Me vas a matar. Pero teniendo en cuenta que la historia que siempre me contaron a mi de Caperucita Roja acababa con el Lobo destripado y muerto, me he imaginado algo bastante siniestro.... XDDDDD En fin, es broma, ya subiré yo algún día algo similar y te podrás meter conmigo XDD

     
  4. Gabriel G. on 2 de septiembre de 2009, 13:30

    Interesante "detrás de las letras" podríamos decir. ¿Quién la hubiera pensado tan traviesa a la niña?...

    Muy buena y simpatiquísima historia.

    Saludos.

     
  5. Esther on 2 de septiembre de 2009, 13:30

    Es un cuento muy divertido y bonito. Supongo que el amor verdadero a veces puede ser así, loco pero, como dices real.

    Saluditos.

     
  6. Emma Grandes on 2 de septiembre de 2009, 22:57

    Ay, Caperucita!!!! Si se enterara la abuela de ese amor a escondidas... En muchas casas ese amor escondido es un lobo gigante al que no quieren que su hija se acerque... Una buena moraleja! Esta no se la cuentes a tu "sobri" Javier hasta que se haga mayor, eh??? XD

     
  7. Virginia Vadillo on 3 de septiembre de 2009, 11:25

    Reithor, es que a según que edades, todo el mundo se desmadra y vive en una primavera continua!! XDD

    Paula, muchas gracias!! Hay cosas que están claras, para qué decir que no! ;)

    Nahus, ves? es que ese final no es apto para niños!! Es mucho mejor el mío! XDDD Estoy deseando leer tu versión del cuento!! (Yo ya escribí por aquí otra versión de Caperucita, y una de Blancanieves, por si te apetece ponerte a buscar en el archivo, jejeje!)

    Gabriel, jejeje, es que estas niñas de ahora... cómo está la juventud!! XDD Muchas gracias! ;)

    Esther, sí, el amor real siempre es un poco loco, creo yo!

    Emma, es que abuelitas y mamás suelen ver demasiados lobos, incluso cuando no los hay... claro que, a veces, también aciertan. Al niño empezaré por contarle la versión original! XDDD

    Besos a todos, gracias por pasaros y dejarme tantos comentarios!!

     
  8. AdR on 7 de septiembre de 2009, 16:49

    Ay, la Cape, como le gusta la marcha :D

    Besos

     


Publicar un comentario
Entrada más reciente Entrada antigua Inicio

Veo el ojo que me mira, no sé qué esperáis de mí. Yo que muero cada día que tú te olvidas de mí... Soy un pez en una jaula, lo que quiero y lo que no, soy todo lo que me pasa... Tú me ves, yo no... (Fito&Fitipaldis)

  • Más ojos que te miran

    • Luz Oscura
    • Achikochi
    • AchoRock
    • Caminando en círculos
    • De mirilla en mirilla
    • Desde el rompeolas
    • Diario de Anonima Mente
    • Diario de incontinencia
    • El blog de Pablo Gonz
    • El Círculo Polar Ártico
    • El CuentaCuentos
    • El doctor Frankenstein, supongo
    • El elefante funanbulista
    • El webLog de Julio Soler
    • El zabuqueral
    • En 99 palabras
    • Espacio de Laura
    • Espacio de Pinchi
    • Extrema pobreza y derechos humanos
    • Hoy voy a escribir
    • Imágenes virtuales
    • Increíble, pero cierto
    • Internacional microcuentista
    • La colada de Odile
    • La espada oxidada
    • La libertad de las rejas
    • Locura ordinaria
    • Microrrelatos perdedores (o no)
    • Minificciones
    • Ni libre ni ocupado
    • Pativanesca
    • Realidades para lelos
    • Relatos en Cadena
    • Scriptoria
    • Seis segundos
    • Todo nuevo bajo la luna
    • Un cuento en tu oído
    • Zaragoza's ninja

    Miradas anteriores

    • ► 2010 (61)
      • ► diciembre (1)
      • ► noviembre (3)
      • ► octubre (3)
      • ► septiembre (2)
      • ► julio (3)
      • ► junio (8)
      • ► mayo (9)
      • ► abril (7)
      • ► marzo (8)
      • ► febrero (8)
      • ► enero (9)
    • ▼ 2009 (101)
      • ► diciembre (10)
      • ► noviembre (8)
      • ► octubre (8)
      • ▼ septiembre (9)
        • Saturno en Darfur
        • Sa!
        • La verdadera razón
        • Huecco Mola :)
        • Culturizándome, el Gernika y otras cosas
        • Límites
        • La boda
        • Mañanas
        • Caperucita (después del cuento)
      • ► agosto (5)
      • ► julio (7)
      • ► junio (8)
      • ► mayo (10)
      • ► abril (10)
      • ► marzo (8)
      • ► febrero (8)
      • ► enero (10)
    • ► 2008 (111)
      • ► diciembre (9)
      • ► noviembre (8)
      • ► octubre (10)
      • ► septiembre (8)
      • ► agosto (5)
      • ► julio (7)
      • ► junio (11)
      • ► mayo (9)
      • ► abril (11)
      • ► marzo (11)
      • ► febrero (10)
      • ► enero (12)
    • ► 2007 (142)
      • ► diciembre (10)
      • ► noviembre (12)
      • ► octubre (12)
      • ► septiembre (14)
      • ► agosto (7)
      • ► julio (10)
      • ► junio (12)
      • ► mayo (15)
      • ► abril (14)
      • ► marzo (16)
      • ► febrero (10)
      • ► enero (10)
    Los textos los escribe Virginia Vadillo, y están protegidos por los términos Atribución-No comercial-No derivadas de una Licencia Creative Commons.

    Creative Commons License


    Las fotos, en cambio, suelen estar sacadas de internet. Si alguna de las fotos te pertenece y quieres que la retire, no tienes más que decirlo!

    Page copy protected against web site content infringement by Copyscape
    ecoestadistica.com

    Por aquí miran

    • Home
    • Posts RSS
    • Comments RSS
    • Edit

    © Copyright El ojo que te mira. All rights reserved.
    Designed by FTL Wordpress Themes | Bloggerized by FalconHive.com
    brought to you by Smashing Magazine

    Back to Top