Hoy ha llegado a mi casa Despiertas. Aún no lo he visto, no lo he cogido en mis manos, no he visto la carátula, ni el makig off, ni los créditos. No han aparecido en pantalla ni la Paca, ni Lidia, ni la señora a la que le duele la cabeza. No he podido comprobar si sale mi brazo ensangrentado, si al final se nota que el señor aquel movía la mano o si el sonido está o no lo suficientemente limpio. Pero estoy igual de contenta, de nerviosa, de emocionada que el día que lo estrenamos en Alhama.
Llevo desde el 14 de octubre deseando volver a verlo. Y desde antes deseando ver Empacados al vacío, algo que no puedo dejar de agradecer a J.C., porque sé que no le apetecía, y que lo montó por nosotros (y porque, aunque no lo reconozca, para él Alhama también fue más que un curso). Sí, el curso de cine de Alhama fue mucho más que un curso, fue mucho más que un corto, fue mucho más que Despiertas.
Llevo desde el 14 de octubre deseando volver a verlo. Y desde antes deseando ver Empacados al vacío, algo que no puedo dejar de agradecer a J.C., porque sé que no le apetecía, y que lo montó por nosotros (y porque, aunque no lo reconozca, para él Alhama también fue más que un curso). Sí, el curso de cine de Alhama fue mucho más que un curso, fue mucho más que un corto, fue mucho más que Despiertas.
Fue, sobre todo, esa sensación de estar empacados, empacados al vacío todos juntos. Fue Alhama. Fue Los Olmos. Fue las noches. Fue el rodaje. Fue las miles de horas de montaje apiñados en el cuarto de J.C. Fue el salón de plenos del ayuntamiento. Fue las galletas de la Paca. Fue ir en bici. Fue cortar calles. Fue dormir poco y salir mucho. Fue no descansar. Fue la furgoneta. Fue reírnos. Y reírnos a carcajadas. Y llorar de la risa. Y seguir riéndonos. Fue Azúcar en los labios.
Fueron Juanfran, Perea, Antonio, Inés, Joan, Juan Miguel, Juan, Javi, Ángela, Álex, Álvaro, Susana, Olga, Pedro.
Y fue Juan Carlos. Fue Raquel. Fue Fuensanta. Fue Karmen. Fue Vero. Fue Fulgen. Fue Juan. Fue Emilio. Fue Alejandro. Fue Sara. Fue David. Fue Gonzalo. Fue Toni. Fue Simón...
Fue algo grande.
Vir, Vir... qué nervios por momentos!!! ya solo te separan de él pocas horitas!!! creo q he gritado y he saltado mil veces hoy de emoción, ya lo ha visto toda la casa, pero falta la señora productora!!!!
Te va a encantar!!!!