Mi pluma se desliza frenética sobre las líneas del cuaderno. El sudor resbala por mi sien, pero no, el cansancio no va a hacer que se cierren mis ojos. Ruido que me envuelve y yo, ajeno a él y ajeno al mundo, aprieto la tinta contra las hojas arrugadas y por mis venas la pasión del trabajo bien hecho me hace seguir y seguir.
El argumento, los personajes, los escenarios, todo parece encajar como las piezas de un puzzle a punto de completarse, en un orden impecable en mi cabeza. Vivos, de carne, más que marionetas en mis manos parecen pequeños pedazos de mi alma. Pero entonces ocurre de nuevo. Sus sonrisas de papel se vuelven carcajadas, me miran de reojo, se burlan de mi esfuerzo, de las líneas escritas, de la pluma de tinta reseca, de otra noche más en vela. Los renglones comienzan a arder ante mí.
Mis ojos cansados miran con estupor el espectáculo y se abandonan a la desidia al tiempo que ven a la musa de la creatividad alejarse despacio, como en un vuelo suave. Minutos antes el escenario se llenaba de vida y, de repente, el caos, el grito, el dolor desesperado de quien rompe con todo. Mis manos, hitéricas, cogen las hojas temblando. ¿Y si...? ¿Por qué no encaja en el resto de la historia? No pude ser... ¿Acaso no me di cuenta de que...? ¡No! ¡No tiene sentido! ¡Nada cuadra, nada se entiende! ¡Nada cuaja y te agarra por dentro! ¡Nada vibra ni conmueve! ¡Basta!
Es un grito sin fuerza, un golpe seco: la pluma estalla contra el suelo dejando un borrón de tinta, o de sangre, o de ambas sobre el papel. Los personajes han muerto, los he matado, ya no llegarán a ningún final. Mis dedos tiemblan sobre sus pedazos aún calientes y destruyen la poca vida que tenían, su destino truncado no es otro que el de un final arrancado de cuajo de las líneas de su guión.
Lloro lágrimas calientes sobre los pedazos del papel para ver entre una nebulosa mi obra destruida.
El argumento, los personajes, los escenarios, todo parece encajar como las piezas de un puzzle a punto de completarse, en un orden impecable en mi cabeza. Vivos, de carne, más que marionetas en mis manos parecen pequeños pedazos de mi alma. Pero entonces ocurre de nuevo. Sus sonrisas de papel se vuelven carcajadas, me miran de reojo, se burlan de mi esfuerzo, de las líneas escritas, de la pluma de tinta reseca, de otra noche más en vela. Los renglones comienzan a arder ante mí.
Mis ojos cansados miran con estupor el espectáculo y se abandonan a la desidia al tiempo que ven a la musa de la creatividad alejarse despacio, como en un vuelo suave. Minutos antes el escenario se llenaba de vida y, de repente, el caos, el grito, el dolor desesperado de quien rompe con todo. Mis manos, hitéricas, cogen las hojas temblando. ¿Y si...? ¿Por qué no encaja en el resto de la historia? No pude ser... ¿Acaso no me di cuenta de que...? ¡No! ¡No tiene sentido! ¡Nada cuadra, nada se entiende! ¡Nada cuaja y te agarra por dentro! ¡Nada vibra ni conmueve! ¡Basta!
Es un grito sin fuerza, un golpe seco: la pluma estalla contra el suelo dejando un borrón de tinta, o de sangre, o de ambas sobre el papel. Los personajes han muerto, los he matado, ya no llegarán a ningún final. Mis dedos tiemblan sobre sus pedazos aún calientes y destruyen la poca vida que tenían, su destino truncado no es otro que el de un final arrancado de cuajo de las líneas de su guión.
Lloro lágrimas calientes sobre los pedazos del papel para ver entre una nebulosa mi obra destruida.
Y, apropiadamente, este lo has empezado con algo de Creación :D
Me ha gustado mucho, sí señor u_u
He de decir que también me ha gustado la verdad, no me resulta empalagoso como el del amor :P
Podría discutiros sobre si el significado de destrucción es sinónimo al de caos así como que el de creación no lleva implicito el de orden, pero mejor lo para algín foro de wizzards of the coast jejeje
Espero que no te importe la libertad de pasar por aqui y comentar ._.
Espero que n
Me está gustando esto de los experimentos, Sarg, es divertido! =)
Y Edel, por supuesto que no me molesta!! Es más, me alegro de verte por aquí, y espero que sigas pasándote!!
Y ya que lo preguntas, yo no creo que destrucción tenga que ir asociado a caos ni creación a orden... a veces el caos es creativo y al contrario....
Por lo del empalagoso amor... tranqui, ya volveré a él! XDDD
Ya que os ponéis tan “radicales”, je,je, os propongo reflexionar sobre el proceso de la escritura. Escribir es una pasión, una elección, un estallido incontrolable de ideas plasmadas en un papel, un juego, una diversión, una provocación…¿tal vez?
Desde mi punto de vista, escribir es un proceso creativo y destructivo a la vez. Escoges las palabras que mejor expresen lo que quieres decir, pasado un tiempo lo mismo te da por desechar alguna…,borrar una línea o un párrafo entero. Mientras en tu cerebro bulle la idea siempre puedes intentar moldearla hasta encontrar aquella expresión que sirva para tus propósitos… La ventaja del escritor es que puede escoger muchas maneras de decir una idea…de intentar transmitirla para que el lector proyecte una imagen mental de aquello que se relata. El inconveniente: si no se consigue llevar al lector a donde se quiere…pues… a reintentarlo toca. Incluso a veces se puede malograr un buen cuento, un relato corto, o un artículo de opinión por querer…”rizar el rizo”. Creo que el buen escritor, es aquel que logra atraer la atención, independientemente de la calidad con la que escribe o el interés subyacente del tema elegido para escribir.
Asimismo escribir es un proceso evolutivo e involutivo, pero como ya he recalcado si de algún modo puedo lograr despertar un sueño que parezca real y que el lector “vea” lo que lee, entonces y sólo entonces se que lo he conseguido.
Saludetes
Estoy contigo, anónimo: escribir es crear, pero también tiene una parte de destruir... A mí me encanta escribir en papel, luego quedan ahí todos los tachones y se ve muy bien el proceso ese de creacióndestrucción. Sigo opinando que normalmente los extremos suelen estar más cerca de lo que parece.
Y oye! muchas gracias por este pedazo comentario! ;)
Un beso!
Para mí escribir es una creación siempre frustrada. Como perfeccionista que soy, nada que escribo llega nunca a llenarme, a convencerme. Hace tiempo aprendí ya a no reescribir lo que ya he escrito, porque sino nunca acabo XDD
Yo por el contrario hace años que no escribo nada sobre papel, hasta tal punto que he llegado a olvidar cómo escribir decentemente (aunque por otra parte, jamás escribí de forma legible). El papel siempre me ha dado la sensación de no llegar a suficiente gente, aparte de que resulta imposible tratarlo posteriormente, como pasa con los medios digitales.
En cuanto a los extremos, coincido en esa opinión: mucha veces los extremos no son conceptos distintos, sino diferentes formas de ver el mismo concepto. Al fin y al cabo, un día lluvioso puede ser un mal día para unos, y un día precioso para otros. La virtud está en el punto medio, pero es en los extremos donde normalmente se *vive* de verdad
Yo creo que no hay belleza comparable a la que emana de la pérdida de un posible camino que no ha de ser tomado, de aquello que quizá de haberse elegido hubiera otorgado líneas sorprendentes de desarrollo, porque al igual nuestros personajes toman decisiones en la ficción, éstas, para resultar verosímiles,(en una novela o relato corto), deben imitar a la vida, deben resultar creíbles dentro de su respectivo contexto.
Pero...¿y si lo increíble reside en nuestra manera de pensar, en nuestras emociones, en una mirada, en un beso que encierra los secretos más ocultos, insospechados y mágicos del ser humano?. Cuando leo a Virginia, veo la vida que ella piensa, siente y vive a traves de lo que escribe; quizás y sólo quizás me pregunto si el hecho de que yo también escriba me sirve para captar y deleitarme con lo que hace, o... con no hacerlo en absoluto si sus palabras no han "sintonizado" con aquello que en realidad quería expresar...aunque casi siempre lo consiga.
Me fascina lo que comentas de caminos perdidos... Aparte de la magia extraña de los extremos, una de las cosas que más me interesa en el plano filosófico-festivo ;)) es todo el tema de las elecciones, las líneas temporales y las probabilidades.
Y efectivamente, la escritura es un medio muy bueno para representar estas "realidades no del todo posibles" o fuera de nuestro alcance. Al menos hasta que exista un medio mejor para retransmitir lo que cada uno piensa, siente o ve a los demás.