Orange Green Pink

El ojo que te mira

Buena gente


Buena gente de nuevo por estos lares.
Increíble, pero cierto, como siempre.
Tenéis que conocerlos :)


5 miradas | Lo ha visto Virginia Vadillo

Etiquetas: Conciertos, El Desván del Duende, Música edit post

Claudia


Yo era un tipo bastante normal, ya me entiende. Con mis rutinas y mis pequeños vicios cotidianos. Nada importante, claro: algún cigarrillo al calor de lo prohibido, dentro del cuarto de baño, y lo de las fotos. Lo de fotografiar cosas con números, digo. Ya sabe, puertas de viviendas, plantas de hospital, precios en escaparates, cualquier realidad en cifras. Se lo digo, es una diversión grande, cada uno se entretiene como le parece.

Salí con mi cámara y mi paquete de Camel en el bolsillo, como siempre, pero apenas pude caminar, porque enseguida me encontré con Claudia. El número se le veía de lejos: un diez, sobresaliente. Fotografiarla, comprenda usted, se convirtió en algo inevitable. Me acerqué y click, click, click... parecía que el disparador se pulsaba solo, era tan fácil. Y, aún así, no logré de primeras agarrar el número. Me costó bastante, no se crea, hay mujeres escurridizas como peces, y Claudia, con su piel de fruta madura y con sus dientes a punto de tirarle un bocado a cualquier cosa, era una de ellas.
Lo de la piel y lo de los dientes no lo sabía entonces, por supuesto. Y se imaginará que tampoco sabía su nombre. De eso me enteré más tarde, en la casa, porque cuando la fotografié las primeras veces aún no nos conocíamos. Y tenía razón, debí haberme presentado antes de soltarle aquel flashazo en la cara, a veces me precipito, soy un hombre impaciente, ¿sabe? Creo que de primeras la asusté un poco. Luego le conté lo de mi afición por la fotografía, aunque ni siquiera así accedió a venir a mi estudio. Me costó bastante llevarla hasta allí, es tan tosca y tan cabezota.

Bueno, sí, reconozco que fue duro, hasta frustrante, porque ella nunca accedía a acompañarme. Creo que pasaron tres o cuatro meses desde el primer día. Y yo la esperaba a cada momento, la buscaba, la fotografiaba de nuevo. La suplicaba que subiera. Porque no había manera de capturar el maldito número. Y ella, escurridiza, sí, escurridiza, siempre se escapaba. Al final tuve que elevarla por los aires. Era ligera, mucho, es raro, porque es bastante alta, ¿no le parece? Pero lo cierto es que pesaba poco. Aunque se movía y se retorcía con fuerza, aleteaba como un pez fuera del agua. ¿Ya le dije lo de los peces, verdad, lo de las mujeres que se escurren? Sí, sí, se lo dije, disculpe, no quisiera repetirme en eso, pero así era ella.

No dejaba de moverse, realmente me dio trabajo sacar la dichosa foto de su diez, de su sobresaliente, nota máxima, y aún así no parecía contenta, no hay quien entienda a las mujeres. En fin, hice la foto y no he vuelto a verla, ahora voy en busca de otros números, qué esperaba, esto funciona así, nunca repito mis tomas, no me serviría de nada.

Y, ¿dice que ella vino aquí, a la comisaría, a ponerme una denuncia? No sé, espero que pueda aclararme los motivos, no lo entiendo. Tal vez es que quiere su foto... No se preocupe, dígale que se calme, que me dé su correo electrónico, que esta misma noche le mandaré una copia.

foto
11 miradas | Lo ha visto Virginia Vadillo

Etiquetas: Cuentos edit post

1992


En una esquina de una sala de la Agencia EFE hay colgada una foto que nadie mira, aunque está viva. Una mujer que entrena más de seis horas al día vuela, se pliega sobre sí misma, se sujeta los pies con las manos y viceversa, y sus veinte dedos rozan el cielo difuminado. Su bañador azul parece una nube más y sus músculos, que sobresalen del cristal y del marco, son el viento huracanado de la tarde. A pesar de su proeza, esta mujer -este pájaro que en pocos segundos se convertirá en pez- no se siente protagonista: se ha quedado a la izquierda de la imagen para que, aunque no haya pie de foto, cualquiera pueda saber en qué momento saltó de un trampolín invisible. Era 1992. A la derecha, borrosa y desenfocada, en segundo plano y sin embargo inconfundible, se alza entre las casitas la Sagrada Familia con sus ocho torres.
9 miradas | Lo ha visto Virginia Vadillo

Etiquetas: Cuentos, Personal edit post
Entradas más recientes Entradas antiguas Inicio

Veo el ojo que me mira, no sé qué esperáis de mí. Yo que muero cada día que tú te olvidas de mí... Soy un pez en una jaula, lo que quiero y lo que no, soy todo lo que me pasa... Tú me ves, yo no... (Fito&Fitipaldis)

  • Más ojos que te miran

    • Luz Oscura
    • Achikochi
    • AchoRock
    • Caminando en círculos
    • De mirilla en mirilla
    • Desde el rompeolas
    • Diario de Anonima Mente
    • Diario de incontinencia
    • El blog de Pablo Gonz
    • El Círculo Polar Ártico
    • El CuentaCuentos
    • El doctor Frankenstein, supongo
    • El elefante funanbulista
    • El webLog de Julio Soler
    • El zabuqueral
    • En 99 palabras
    • Espacio de Laura
    • Espacio de Pinchi
    • Extrema pobreza y derechos humanos
    • Hoy voy a escribir
    • Imágenes virtuales
    • Increíble, pero cierto
    • Internacional microcuentista
    • La colada de Odile
    • La espada oxidada
    • La libertad de las rejas
    • Locura ordinaria
    • Microrrelatos perdedores (o no)
    • Minificciones
    • Ni libre ni ocupado
    • Pativanesca
    • Realidades para lelos
    • Relatos en Cadena
    • Scriptoria
    • Seis segundos
    • Todo nuevo bajo la luna
    • Un cuento en tu oído
    • Zaragoza's ninja

    Miradas anteriores

    • ▼ 2010 (61)
      • ► diciembre (1)
      • ▼ noviembre (3)
        • Buena gente
        • Claudia
        • 1992
      • ► octubre (3)
      • ► septiembre (2)
      • ► julio (3)
      • ► junio (8)
      • ► mayo (9)
      • ► abril (7)
      • ► marzo (8)
      • ► febrero (8)
      • ► enero (9)
    • ► 2009 (101)
      • ► diciembre (10)
      • ► noviembre (8)
      • ► octubre (8)
      • ► septiembre (9)
      • ► agosto (5)
      • ► julio (7)
      • ► junio (8)
      • ► mayo (10)
      • ► abril (10)
      • ► marzo (8)
      • ► febrero (8)
      • ► enero (10)
    • ► 2008 (111)
      • ► diciembre (9)
      • ► noviembre (8)
      • ► octubre (10)
      • ► septiembre (8)
      • ► agosto (5)
      • ► julio (7)
      • ► junio (11)
      • ► mayo (9)
      • ► abril (11)
      • ► marzo (11)
      • ► febrero (10)
      • ► enero (12)
    • ► 2007 (142)
      • ► diciembre (10)
      • ► noviembre (12)
      • ► octubre (12)
      • ► septiembre (14)
      • ► agosto (7)
      • ► julio (10)
      • ► junio (12)
      • ► mayo (15)
      • ► abril (14)
      • ► marzo (16)
      • ► febrero (10)
      • ► enero (10)
    Los textos los escribe Virginia Vadillo, y están protegidos por los términos Atribución-No comercial-No derivadas de una Licencia Creative Commons.

    Creative Commons License


    Las fotos, en cambio, suelen estar sacadas de internet. Si alguna de las fotos te pertenece y quieres que la retire, no tienes más que decirlo!

    Page copy protected against web site content infringement by Copyscape
    ecoestadistica.com

    Por aquí miran

    • Home
    • Posts RSS
    • Comments RSS
    • Edit

    © Copyright El ojo que te mira. All rights reserved.
    Designed by FTL Wordpress Themes | Bloggerized by FalconHive.com
    brought to you by Smashing Magazine

    Back to Top