Te colecciono guardando en fragmentos retales del día en que tus ojos se posaron por primera vez en mí. Aquella camisa de cuadros, micrófono en mano; los lunares de tu cuello, un escalofrío por la médula y el sabor desconocido e inexplicable del azúcar. Nos quedamos con los peldaños impares, con la madrugada cálida que queda después de las noches de invierno, con el espejismo remoto de un futuro próximo y con la vaga intuición del recorrido que hace la sangre después de latir.
Ahora que la colección me rebosa, solo puedo pensar en aquella canción. Me encanta conocerte cada noche para elegir retales nuevos una mañana tras otra. Conocerte cada noche es lo que más me gusta de ti.

2 miradas

1. Anónimo on 11 de octubre de 2008, 20:30

   Bonito bonito bonito!!. Hay cosas super bonitas dentro del texto. E incluso una cosilla que dejare para la posdata... xDDD.
   
   De esa vez "que tus ojos se posaron por primera vez" hasta el conocerte cada noche, hay muuuuchas noches en medio y es cierto que esa parte de saber cada dia "retales" nuevos, es genial!!!.
   
   Y... ummm... el titulo... me parece precioso!!!!!!!.
   
   PD: Ahora viene lo bueno! xDD. Jumm... porque que dirias si alguien... xDD te invita a una copa... pongamosle, por poner un ejemplo: Beef Limon (es un suponer eh!! xDDDD) y a eso le acompañas encima una cancion por ejemplo como la del enlace??? xDDDDD. Anda que... xDDDD. Pa que luegon diga la gente k eso no ta bien... xDDDD

    
2. Virginia Vadillo on 13 de octubre de 2008, 11:52

   Hombre, llegados a según qué grado de conocimiento, esa copa compartida (me quedo con ron-cola en vaso ancho, hielos pequeñitos, zumo de limón y gominola de café)no se puede decir que no esté bien!! XDDD
   
   Esas muuuuchas noches en medio son también parte de concerte... no las cambiaría por nada! ;)
   
   Me alegro qeu te haya gustado!! Un besito!